01 Feb CREADOC, un círculo de colaboración en el que lo compartido es más poderoso que lo personal
Cinco documentales en fase de escritura cierran su primera fase de creación en la XVI edición de MiradasDoc
Ricardo Acosta entiende CREADOC como un círculo de colaboración. “Lo que pasa en el círculo es mucho más fuerte y poderoso que una persona. Como documentalista, tener el privilegio, de recibir el feed back y el apoyo de otras gentes que trabajan en el mundo documental no es otra cosa que hacer que tu trabajo y tu proyecto se mejoren, porque te da ese apoyo que viene del círculo, que en este caso es CREADOC. Es privilegiado y también muy importante”, dice el editor de documentales cubano –y miembro del jurado de los concursos internacionales de cortometraje y largometraje del festival–, que participa como tutor en la fase final del Laboratorio de Desarrollo de Documentales de Creación en su X edición.
El programa de escritura de guion documental organizado por el Instituto Canario de Desarrollo Cultural (ICDC) del Gobierno de Canarias y MiradasDoc, dirigido por el cineasta cubano Rolando Díaz, con el apoyo de Domingo de Luis, eligió impulsar en el periodo 2022-2023 dos proyectos en la Línea de ópera prima: Las Revoltosas. Toda una revolución, de Pedro Ayose Reyes Martín, y Sicario, de Alejandro Artiles Rodríguez. En la línea profesional resultaron escogidos Geografía poco extensa, de Dailo Barco Machado; Tibicenas, de Gerardo Carreras, y Sentir El Hierro, de Antonio Ojeda Frías.
“A mí lo que más me ha sorprendido es la diversidad de los proyectos, tanto temática como estilística y generacional; esto último me parece muy valioso. Estoy muy contento. Son todos proyectos hechos por cineastas canarios o que ocurren en Canarias, y, pese a ello, creo que hay una diversidad temática en cuanto a las propuestas, incluso de épocas distintas: películas que remiten al pasado como es el caso de la película de Dailo Barco, o historias contemporáneas como por ejemplo el proyecto Sicario, sobre un personaje canario que vive actualmente en Miami”, apunta Eloy Enciso, que completa el grupo de tutores de esta fase final del laboratorio.
“MiradasDoc tiene sus tentáculos en África, en Sudamérica, en el sur del norte, también -hay mucho sur en Europa-. CREADOC es un programa hecho desde Canarias para voces canarias, pero con unas historias que trascienden eso. Cada una de las historias se está contando desde un lugar de pertenencia, no es alguien contando una historia porque tiene un acceso privilegiado, pero que no la entiende, o la va a entender desde el privilegio y no desde la pertenencia. Eso es también importante para mí en el mundo documental de hoy: ¿desde dónde estamos contando las historias? Se pueden contar si no perteneces a ellas, pero, entonces, por lo menos que sean contadas desde la empatía y no desde el sentido de posesión o de privilegio. Creo que eso está presente en cada una de las historias”, subraya el editor cubano.
Enciso detalla: “la diversidad estilística me ha parecido muy interesante, desde proyectos que tienen escritura muy elaborada, con ese territorio fronterizo entre el documental y la ficción, otras con una parte autobiográfica, u otras más cercanas al documental de testimonio. en fin, creo que esa diversidad estilística muestra una cierta salud del género y de la apuesta que lleva haciendo ya muchos años MiradasDoc, no solo por las películas terminadas, sino por ser también un laboratorio y una cantera para nuevos proyectos y nuevas miradas”.
CREADOC se organiza a través de tres encuentros anuales. El tercero de ellos se desarrolla siempre en el marco de Festival y Mercado Internacional de Cine Documental de Guía de Isora, con el objetivo de que los cineastas participantes en este programa puedan acercarse a obras ya terminadas y a vislumbrar el funcionamiento y las oportunidades que ofrece su mercado. “Creo que lo primero que puede aportar un festival como MiradasDoc es un espacio de trabajo y de encuentro, esto es muy importante porque los procesos de creación de escritura suelen ser bastante solitarios. Es bueno el hecho de encontrarse con otras personas que están en ese mismo momento del proceso. solamente por eso creo que estos espacios tienen interés. Además, es un lugar de encuentro con los profesionales de la industria que puede conducir a encontrar alianzas y apoyos para ese proyecto que está ahora en el estado incipiente”, apunta Enciso.
Acosta lo expresa de esta manera: “si yo tuviese el privilegio de estar acá con mi proyecto en un laboratorio, viendo películas de otros realizadores, que han estado en él antes antes o en otros laboratorios, eso a mí me abre las entendederas, pero también me abre las ventanas a otras miradas, como también me da la oportunidad de inspirarme, de entender cómo alguien resolvió el cuento de contar el cuento. Siempre digo que, cuando eres un documentalista, ver el cine de tus colegas te ayuda a ver el cine mismo que tú estás haciendo. El cine que contamos es una sumatoria del cine que cuentan otros”.
La décima edición de este laboratorio de escritura de guion documental convocó a los participantes a un primer encuentro presencial en mayo de 2022, en el marco del Festival FICMEC, con la tutorización de los especialistas Clare Weiskopf y Robert Krieg. La segunda cita, celebrada de manera virtual en octubre del mismo año, estuvo tutorizada por Abner Benaim.