España. Mallorca. Magaluf.
Cosas muy extrañas están ocurriendo en esa zona del litoral balear. Olor a meados y a sangre, coches de policía y ambulancias recorren las calles sin que nadie les dé importancia, gritos en mitad de la noche que uno no sabe diferenciar si son de alegría o de auxilio…
Magaluf solo es una pequeña y tranquila localidad de 4.500 habitantes que muchos se han aventurado a llamarle la Twin Peaks balear. Y es que Magaluf y sus ciudadanos se debaten entre el malditismo cotidiano y el genuino placer vacacional, un lugar que se ha transformado en el paradigma europeo del turismo lowcost basado en el entretenimiento nocturno desenfrenado.