05 Feb THIMBO
Makun (No llores) – Dibujos en un C.I.E. / Emilio Martí López (30’)
SERGIO BARRETO
El Centro de Internamiento de Extranjeros de Barranco Seco (Gran Canaria) tiene una ocupación del setenta y cinco por ciento, mientras que el de Hoya Fría (Tenerife) está al setenta y siete por ciento. Los Centros de Internamiento de Extranjeros pertenecen, para la óptica acomodada de los occidentales, al corolario de siglas que el Estado activa para hacer frente a los movimientos migratorios de apariencia irregular. El filósofo francés Michel Foucault escribió: «Las cárceles, los hospitales y las escuelas presentan similitudes porque sirven para la intención primera de la civilización: la coacción». Siguiendo este cauce deductivo: ¿Es un C.I.E un lugar donde se ejerce la coacción sobre las personas? ¿Acaso no es una escuela, una cárcel y un hospital a la vez? ¿O deben rebajarse las expectativas críticas y definir C.I.E como un lugar en el que se regula la condición de los individuos que cruzan nuestras fronteras sin permiso? Makun (No llores) – Dibujos en un C.I.E de Emilio Martí López, narra varias historias de sueños (una vida mejor) y pesadillas (viajes peligrosos y el encierro en C.I.E’s al llegar a Europa), mediante dibujos hechos por centenares de manos anónimas y con el testimonio de tres personas inmigrantes y activistas por los Derechos Humanos. Thimbo Samb es uno de los testimonios que aparece en Makun. Conocido como Thimbo Samb, hoy es actor y youtuber. El humor de Thimbo Samb es cáustico y cotidiano. No hay redoble de platillos ni planificadas mímicas, pero sí un personaje entrañable y múltiples golpes con puños de realidad. Thimbo es crítico con los sesgos cognitivos. Parodia a los inmigrantes africanos porque él pertenece a esos pueblos de costumbres que nuestras ideologías domésticas no aceptan. Thimbo, sobre todo, es un activista vomitado por el sistema español a las calles después de una cadena de reclusiones insanas. Vino de África, pero como no lo hizo con un maletín con diamantes, fue considerado irregular. En la dictadura monetaria el racismo no es rentable. Las fronteras se cierran para los pobres, sean caucasianos, negros o latinoamericanos, por lo que la historia de Thimbo no es la de un negro. En España hay senegaleses multimillonarios que reciben apretones de manos de las altas esferas. El marco que retrata a este héroe de las calles es la pobreza. Partamos de aquí para entenderlo y para comprender el valor de su viaje, ya que así, como una semilla improductiva o un objeto inhábil lo consideraba el sistema capitalista europeo. Pero Thimbo tiene el mayor tesoro de los cuerdos: el humor. Y gracias a él nos aporta un talento que desde el año 2012 participa en cortometrajes: Un lugar mejor (2012) Barcelone ba barsakh (2014). Mediometrajes: Makun (No llores) – Dibujos en un C.I.E (2019) La puerta azul (2013) El silencio del pantano (2020) BLACKBEACH (2020) Perdida – Atresmedia (2020). Ser otra víctima de un C.I.E es un ejemplo claro de que las personas que mantenemos aisladas de nuestros bienes y servicios no son irregulares indignos de portar un número de identidad; son Thimbo. Los C.I.E’s no deben existir como lugares de hacinamiento y olvido humanitario. Las reglas que regulan la presencia de seres humanos en los territorios tienen que cambiar radicalmente y volcar sus recursos en mecanismos para integrar y no para detener.